Tras la finalización de la audiencia de cesura que culminó con la condena a 22 años de prisión para el policía Simón Cruz por el asesinato de Lautaro Labbé, el abogado defensor del MPF, el doctor Julio Puentes, brindó declaraciones a la prensa, expresando la posición de los familiares del joven.
“La muerte de un hijo es una pérdida irreparable”, afirmó el letrado, enfatizando el profundo dolor que padece la familia. “No le van a devolver la vida a Lautaro, pero por lo menos va a tener un aliciente de que la persona que disparó fue condenada a una pena dentro de todo severa”.
La condena de 22 años de prisión fue impuesta luego de que el jurado popular hallara culpable a Cruz del delito de “homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego”. A pesar de que la fiscalía había solicitado una pena mayor argumentando que el crimen fue cometido por un miembro de la fuerza policial, el jurado desestimó esta agravante.
Consultado sobre la pena, el doctor Puentes se mostró conforme: “Estoy conforme con la pena por lo pedido por la fiscalía y la querella, considero que es suficiente para el delito que se le ha imputado”.
En sus declaraciones, el abogado también hizo hincapié en la necesidad de diferenciar la conducta del condenado de la institución policial en su conjunto. “Hay que salvar a la institución policial porque más allá de que hay personal que no cumple con su función o en este caso comete un hecho grave, eso no representa a la totalidad de los funcionarios policiales, que en su mayoría trabajan a destajo y cumplen adecuadamente con su función”, sostuvo. “Los que no lo hacen y cometen hechos delictivos graves, como en este caso, son pasibles de una sanción bastante más grave”.
Puentes también reveló que el juicio trató no solo el homicidio, sino también un encubrimiento por parte del resto del personal policial que estuvo presente en la escena del crimen. “Ellos también fueron condenados a penas privativas, pero en suspenso”, concluyó.