Un informe balístico elaborado por la Policía de la Ciudad incorporado a la causa judicial confirmó que el disparo que hirió gravemente al fotógrafo Pablo Grillo no fue un accidente ni un error. La pericia determinó que el gendarme Héctor Guerrero incumplió los protocolos de uso del arma lanzagases, descartando la versión oficial sobre un disparo dentro del ángulo permitido.
Según el análisis, el proyectil impactó en Grillo de manera irregular, mientras él registraba con su cámara la represión ordenada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, durante la manifestación del 12 de marzo frente al Congreso. La reconstrucción, realizada el 11 de agosto por la División Balística de la Policía de la Ciudad con participación de peritos de todas las partes, señaló que si se hubiera respetado el protocolo, el disparo no lo habría alcanzado.

Estado de salud de Grillo y avance de la causa
Pablo Grillo permanece internado tras múltiples cirugías. Su padre, Fabián Grillo, informó a Página 12: “Estamos esperando un nuevo informe de los neurocirujanos. Hoy estaba clínicamente estable, pero en la última tomografía se detectó una pequeña expansión. Mañana tendremos más precisiones con los resultados de los estudios”.
En paralelo, el gendarme Héctor Guerrero fue citado a declaración indagatoria por la jueza María Servini para el próximo 17 de septiembre.