La jueza Julieta Makintach, quien formó parte del tribunal que llevaba adelante el Juicio por la muerte de Diego Maradona, fue imputada este miércoles por cohecho, violación de los deberes de funcionario público, abuso de autoridad, malversación de caudales públicos y peculado de servicios.

El escándalo se produjo en abril pasado, cuando Makintach filmaba un documental llamado “Justicia Divina” mientras se desarrollaban las declaraciones de testigos, acusados y la investigación fiscal. Este hecho derivó en la anulación del juicio y ahora motivó la imputación formal de la jueza.

Según el portal Infobae, los jueces Carolina Asprella, Cecilia Chaieb y José Amallo consideraron que existen elementos suficientes para endilgarle estos ilícitos. Entre las pruebas, figura material audiovisual que demuestra que “utilizó los Tribunales de San Isidro para realizar una filmación con fines comerciales” y que “participó y promovió personalmente este proyecto”, empleando recursos públicos para fines privados y comprometiendo su imparcialidad como jueza del tribunal.

Asimismo, se comprobó que Makintach permitió el ingreso al juicio de un guionista, camarógrafo y productor para sumar al documental, aprovechando su cargo para favorecer la producción del material audiovisual.

Pedido de destitución

Por su parte, Fernando Burlando, abogado de Giannina y Dalma Maradona, solicitó la destitución de la jueza: “Se solicita la destitución de Makintach y la prosecución de la causa penal, argumentando que sus conductas constituyen causal autónoma de enjuiciamiento y afectan la vigencia del Estado de Derecho”. Burlando señaló que las maniobras de la magistrada tuvieron impacto directo en la familia de Maradona y requieren una sanción institucional mayor.

La investigación contra Makintach se viene realizando desde mayo y, según los magistrados, los elementos recabados justifican la imputación y la posible continuidad de acciones penales en su contra.