Pablo Ríos, médico del Hospital Regional con 14 años de trayectoria, atraviesa un duro momento personal y de salud. Hace tres años perdió a su esposa y, hace tres meses, fue derivado de urgencia al hospital tras ser diagnosticado con leucemia aguda. Desde entonces permanece internado, a la espera de un trasplante de médula ósea, con aislamiento estricto y sin horario de visitas.

Ríos es el único sostén de su familia: su hijo mayor tiene 23 años, su hija 16 y su hijo menor 10. La situación generó la necesidad de una colecta solidaria para cubrir los gastos médicos y familiares, la cual logró alcanzar su objetivo en menos de 24 horas, generando un gesto de solidaridad masiva.

Actualmente, el doctor cuenta con un donante familiar para el trasplante, aunque deberá permanecer internado hasta diciembre mientras se realizan los tratamientos y se busca compensar la compatibilidad. Por el momento no puede retomar sus labores en el hospital.

Desde la organización de la colecta expresaron su agradecimiento por la rápida respuesta de la comunidad y aclararon que, aunque ya no se recolecta dinero, quienes deseen continuar colaborando pueden hacerlo mediante un alias previamente establecido.