El presidente Javier Milei respaldó públicamente el ataque militar lanzado por Estados Unidos contra instalaciones nucleares en Irán. Aunque no emitió un comunicado oficial, el mandatario argentino se expresó a través de la red social X, donde compartió mensajes de apoyo al accionar del gobierno de Donald Trump y replicó un video con declaraciones del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
“Estamos del lado correcto de la Historia. Del lado de la Justicia”, publicó el ministro de Defensa, Luis Petri, quien también celebró la ofensiva y aseguró que “mañana el mundo despertará más libre y en paz”. Petri remarcó que Argentina “fue víctima del terror de Irán y lo pagamos con sangre de inocentes”, en referencia a los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA durante la década del noventa.
En esa línea, el vocero presidencial Manuel Adorni expresó en su cuenta: “Terrorismo nunca más. Fin”. Mientras tanto, Milei retuiteó publicaciones de La Derecha Diario y del propio Netanyahu, quien elogió a Trump por impedir que Irán acceda a “las armas más peligrosas del mundo”. “El presidente Trump y yo decimos: primero viene la fuerza, luego viene la paz”, dijo el primer ministro israelí.

La postura del gobierno argentino generó un marcado contraste con la de otros mandatarios latinoamericanos. Desde Colombia, Gustavo Petro cuestionó duramente la ofensiva; lo mismo hicieron los gobiernos de Cuba y Venezuela, que denunciaron una violación al derecho internacional y advirtieron sobre una peligrosa escalada en la región.
En medio del conflicto, el gobierno iraní apuntó contra el argentino Rafael Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Uno de los principales asesores del ayatolá Ali Jamenei, Ali Larijani, lanzó una amenaza directa: “Una vez que termine la guerra, nos ocuparemos de Grossi”.
La advertencia se produjo tras la publicación de un informe del OIEA que detalla la acumulación de uranio enriquecido en instalaciones iraníes. Teherán considera que ese documento influyó en el aval internacional a la ofensiva militar.
Irán también presentó una queja formal contra Grossi ante el Consejo de Seguridad de la ONU, acusándolo de parcialidad. En respuesta, el diplomático argentino aseguró en una entrevista con CNN que sus informes son técnicos y no justifican ninguna acción militar: “Una decisión de ese tipo es política y no tiene nada que ver con lo que nosotros decimos”.
Un alineamiento con antecedentes
El respaldo explícito de Milei a Estados Unidos recuerda la postura adoptada por Carlos Menem durante la Guerra del Golfo, cuando envió tropas argentinas al conflicto en Medio Oriente. Aquella decisión, para muchos analistas, fue un antecedente de los atentados sufridos en la Argentina en los años 90.
Ahora, con un nuevo conflicto en el centro del escenario global, el gobierno argentino vuelve a alinearse con Washington e Israel, en una posición que promete generar repercusiones tanto internas como internacionales.