El 11 de septiembre, Argentina celebra el Día del Maestro, fecha instituida en honor al fallecimiento de Domingo Faustino Sarmiento en 1888, considerado el “Padre del Aula” por su impulso a la educación pública y gratuita.
La jornada no solo busca recordar a una figura histórica, sino también destacar la tarea cotidiana de miles de maestras y maestros que, con dedicación y compromiso, acompañan la formación de niñas, niños y jóvenes en todo el país.
En cada rincón del aula se transmite mucho más que conocimiento: se forman valores, se fortalecen vínculos sociales y se construye ciudadanía. Por eso, la efeméride es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia del rol docente en tiempos de cambios culturales y tecnológicos que plantean nuevos desafíos en la enseñanza.
Si bien las condiciones laborales, la necesidad de capacitación constante y la falta de recursos son reclamos recurrentes del sector, el Día del Maestro es también un espacio para agradecer y valorar a quienes eligen enseñar, dejando una huella imborrable en sus alumnos y en la sociedad.